El valor del diseñador…que se atreve

Es frustrante tener las ideas, las ganas, la creatividad, y no saber cuándo, dónde y cómo empezar. Herramientas siempre hay, es cosa de ingeniárselas para encontrarlas o crearlas, pero lo importante es dar ese primer paso, que aunque suena fácil, es lo más difícil de hacer.

Así fue como después de pasar por este laberinto de interrogantes, dejé el miedo atrás de no saber si mi decisión era la correcta o no, y comencé mi viaje.

Ahora estoy aquí, en Buenos Aires, Argentina, decidida a hacer de la Ilustración Infantil mi estilo de vida. Soy Erika y soy Diseñadora Gráfica, pero, ¿quién soy en realidad? Aún no lo descubro del todo, pero a mis escasos (o avanzados) 28 años de edad, estoy dispuesta a no diseñar porque toca diseñar, sino a hacer lo que me mueve, lo que me apasiona, lo que disfruto, y en mi caso, ilustrar libros para chicos, es mi motivación.

Yo al igual que muchos no sabía hacia dónde dirigir mi carrera, trabajé en agencias de diseño y lo disfruté. Aprendí bastante, pero algo me faltaba.

Durante mi carrera, tuve la oportunidad de realizar diversos proyectos, entre los cuales hubo algunos que despertaron en mi un deseo de seguir explorando ese mundo, el de los libros infantiles. Diseñé dos libros ilustrados completamente, de los cuales uno quedó como semifinalista en los Premios Quórum, en México.

El otro libro fue mi proyecto de Tésis, llamado “Diseño de un libro álbum de leyendas mexicanas para los primeros lectores”, el cual me dio la oportunidad de conocer a mi gran maestro Istvan Schritter. Y así la historia comienza. 

Me encontraba recaudando información en la web, y entre millones de links me apreció el blog de un ilustrador argentino, con libros publicados en Argentina, México, España, Suiza, Colombia, EEUU, Corea y Emiratos Árabes Unidos.

Istvansch es un diseñador, ilustrador y escritor, con bastante experiencia en el tema que estaba desarrollando, así que lo contacté, y muy amablemente me ayudó. Desde entonces mantuvimos contacto. Inesperadamente, un día recibí un correo suyo, invitándome a participar en los cursos anuales que el imparte desde hace algunos años. Ese correo no me dejo dormir tranquila, ¡tenía que hacerlo! 

No fue una decisión sencilla, tendría que dejar mi trabajo de ese entonces y todo lo que implica cambiar tu residencia, comenzar una vida nueva en un país en el que nunca había estado, sólo por un curso, que no sabía si cubriría mis expectativas o no. Era vivir tranquilamente con las comodidades que uno tiene al vivir en su casa, o dejar todo e ir en busca de aquello que crees que es tu pasión.

Vivir aquí no ha sido fácil, pero hoy no me arrepiento. Aún sigo aprendiendo y descubriendo, y nunca puedes arrepentirte de algo que estás intentando. Arrepentirte está permitido si te quedas pensando…¿qué hubiera pasado si…?

Argentina es un lugar lleno de talento, de gente creativa y emprendedora, con ideas novedosas que le dan a este país, un toque de color e imaginación por cada rincón al que pasas.

Buenos Aires te llena de inspiración, aquí no sólo hay escuelas increíblemente buenas en arte y diseño, la gente además de talentosa y profesional, es amable y sin ningún pero, comparte con otros su forma de trabajar, su manera de enfrentar al mundo laboral y los tips que han aprendido a través de las enseñanzas de la vida.

Mi consejo el día de hoy, es atreverse a atreverse. Sí hay mucha competencia, eso no es ningún secreto, pero luchar por lo que realmente quieres, siempre vale la pena.

No aseguro que seré la mejor ilustradora de México ni del mundo, pero soy una persona que no se conforma, que busca algo más, y como cualquier diseñadora, no soy una persona normal, soy una loca que sueña dormida y despierta, que se equivoca pero sigue intentando, que trabaja bajo mucha presión y aún así siempre termina entregando lo que le piden. Los diseñadores no somos gente normal, nuestra mente siempre está en el cielo, pero logramos mantener los pies firmes en la tierra (o al menos hacemos el intento).

Me encanta ser diseñadora e ilustradora, y comparto este pedacito de mi vida para decirte que lo hagas, que persigas tus sueños, que diseñes tu vida como tú quieres y no cómo la gente dice. Y cierro con esta frase, que algún día vi en la redes sociales y se me quedó muy marcada: “Tu mente es libre, ten el coraje de seguirla”.